En memoria de Juan Diego Caballero Oliver, un Amigo Atticus.
Murió como se muere
por sorpresa,
en silencio
sin que todos los amigos
le regalasen un verso.
Murió como se muere
en silencio
con el amor de los suyos
en un ramo junto al pecho.
Murió como se vive
cuando se es corazón latiendo,
con los susurros amando
y a viva voz sonriendo